Parece que fue ayer cuando decíamos que cuánto quedaba para el 2011. Y aquí estamos. Llorando y riendo a la vez porque ya celebramos un año más de risas, de dolor, de alegría, de felicidad. Es época de crecer, de compartir, de reír, de amar. Es tiempo de creer, en lo que ya no creíamos. Es tiempo de amar, como si no estuviéramos rotos. Es tiempo de empezar algo nuevo.
Feliz noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario